El mísero punto logrado por el Napoli contra el Torino, al final, incluso se convierte en un punto ganado: el Bologna se detiene en uno de los grandes partidos de la jornada y cede ante el rodillo compresor del Inter: el gol de Bisseck decide el partido de las 18 y frena al equipo de Thiago Motta, que esperaba poder extenderse por el cuarto puesto y seguir persiguiendo la Champions League.

Una Champions League que ahora entra en su fase crucial: mañana Fiorentina y Roma se jugarán el final de una ronda que mira constantemente a los primeros puestos y mientras tanto, el Napoli de Francesco Calzona no está completamente fuera de la carrera por el 4º o incluso 5º puesto, que parece cada vez más una puerta adicional hacia la Europa que cuenta.

¿Un punto ganado o dos perdidos? Según los aficionados, el empate contra el equipo de Juric ayer en el Maradona ha complicado definitivamente las cosas. La clasificación, sin embargo, dice lo contrario. Al menos por esta noche: los azules se colocan a -7 del Bologna a la espera de que se complete toda la jornada.

Dentro de una semana, sin embargo, el desafío del Inter tocará precisamente a Osimhen y compañía: el próximo domingo, de hecho, el Inter-Napoli en San Siro será el obstáculo quizás más grande para los azules en la carrera por la zona Champions, con el calendario que después del descanso presentará la cuenta con el Atalanta (pero en el Maradona). Los números aún no condenan al equipo de Calzona, que sin embargo debe despertar. Y soñar, quizás, solo el próximo martes, cuando la Champions ya será una realidad en Barcelona contra los blaugrana.