A los 73 años, cumple el sueño de toda una vida y se gradúa en Medicina y Cirugía después de 54 años. Lo había prometido a su padre antes de que falleciera, y Enzo Fernando Buccoliero ayer cumplió con este deseo, entre la emoción de sus nietos, amigos y bisnietos reunidos en el aula del complejo de Santa Patrizia donde se llevaron a cabo las ceremonias de graduación del curso de Medicina y Cirugía de la Universidad Vanvitelli.
Enzo organizó un pequeño autobús para llevarlos a todos desde Sava, en la provincia de Taranto, a Nápoles, para compartir la alegría y la emoción de este gran día, cuando finalmente se puso la corona de laurel que su cuñada le colocó en la cabeza, después de haber defendido con emoción su tesis sobre Enfermedades nerviosas y mentales titulada “Parkinson y parkinsonismos atípicos (plus)”, asignada por su tutor, Antonio Gallo, profesor asociado de Neurología en la Clínica Neurológica de la Ateneo Vanvitelli.
“Una historia ejemplar de resiliencia - comentó al final de la ceremonia de graduación el profesor Gallo - Enzo Buccoliero ha permanecido inscrito en la universidad durante 54 años porque, a pesar de las muchas adversidades que la vida le ha presentado, quería completar sus estudios iniciados en 1970. Nada lo ha hecho desistir, ni siquiera despertarse a las 2 de la madrugada para tomar el autobús a las 5 de la mañana, haciendo 7 horas de viaje y, a menudo, permaneciendo despierto también la noche siguiente esperando en la estación el autobús de regreso. Esto para cada examen, encuentro con los profesores o para asistir a las clases”.
Los primeros abrazos después de la proclamación como Doctor en Medicina y Cirugía fueron de sus nietos, hijos de su hermano mayor que ya no está, pero que había sido el artífice de su inscripción en la Facultad de Medicina, como se llamaba en aquel entonces. “Mi hermano se estaba graduando en Letras aquí en Nápoles y me empujó a inscribirme en Medicina. Luego sucedieron muchas cosas... La enfermedad de mi madre, a quien asistí durante 18 años, luego la de mi padre, más breve, pero igualmente dolorosa y que requería cuidados, las dificultades económicas, mi trabajo como agricultor... La vida puede desviar tu camino, ralentizarlo, pero esto no significa que no se pueda alcanzar la meta, los propios sueños. Incluso a los 73 años, como me sucedió hoy”.
Enzo Fernando Buccoliero, para hacer frente a las enfermedades de los padres y a las dificultades económicas, se arremangó haciendo muchos trabajos y continuando sus estudios en el tiempo que le era permitido. Primero agricultor, luego empleado en la Oficina del Juez de Paz, y finalmente empleado municipal en los Servicios Sociales. “Los servicios sociales de alguna manera tenían que ver con el cuidado de las personas y esto siempre había sido mi deseo. Y luego se lo había prometido a mi padre, que me lo pidió antes de morir. Me dijo: Enzo, no te rindas. Y yo lo hice”.
“Esta historia debe ser un ejemplo para muchos jóvenes estudiantes - comentó el Rector de la Universidad Vanvitelli, Gianfranco Nicoletti - Las dificultades en los estudios y en la vida son inevitables, pero la tenacidad y la perseverancia son elementos necesarios para alcanzar los propios objetivos. Todos tienen derecho a la educación y a la formación, y la Universidad hoy debe ser más inclusiva que nunca y, en la medida de lo posible, de apoyo a los jóvenes y a su futuro”.