Aston Barrett, el bajista de los legendarios Wailers, ha muerto a los 77 años en Miami, en Florida. «Family man», como era conocido por el número de hijos, fue el motor rítmico que acompañó a Bob Marley, Peter Tosh y Bunny Wailer en los discos y en los conciertos que hicieron famoso el reggae en el mundo.
Nació el 22 de noviembre de 1946 y creció en la capital jamaicana de Kingston. Al anunciar su muerte, su familia dijo que Barrett había enfrentado una «larga batalla médica», pero no proporcionó detalles. Sin embargo, la fama llegó antes, como miembro de los Upsetters, la banda de apoyo del pionero del reggae Lee «Scratch» Perry. En 1974 se unió a la banda de Bob Marley. Su trabajo en el bajo es una característica fundamental de muchos éxitos de los Wailers, incluyendo «I shot the sheriff», «Get up stand up», «Stir it up», «Jamming», «No woman, no cry» y «Could you be love».
«La batería es el latido del corazón y el bajo es la columna vertebral», solía decir: «Si el bajo no está bien, la música tendrá la espalda mala, por lo tanto estará paralizada». Después de la muerte de Bob Marley, de cáncer a los 36 años en 1981, los Wailers continuaron actuando, con numerosos cambios de formación. En 2013 Barrett declaró a la BBC que tenía 23 hijas y 18 hijos: «Soy un hombre de familia. Tengo 41 hijos».