El marido e hijos de una mujer de 82 años residente en Nápoles, que murió en 2015 en el hospital, obtienen del Tribunal Civil una compensación de casi 210 mil euros, pero deciden apelar para pedir a los jueces “la determinación de la responsabilidad concurrente de la Región de Campania”. El incidente se remonta a la mañana del 23 de marzo de 2015, cuando la anciana - esposa y madre de tres hijos - se vio obligada a solicitar la intervención del 118 por los fuertes dolores causados por una sospecha de fractura (luego confirmada en urgencias) causada por una caída en casa.
La ambulancia - según la documentación presentada al juez que llegó a la casa de la mujer muchas horas después de las llamadas, sin médico y sin equipo de reanimación - trasladó a la mujer de 82 años a un hospital en Nápoles donde los médicos encontraron una serie de fracturas graves y luego también problemas pulmonares. Precisamente estas últimas dificultades impulsaron a los médicos a ingresarla en el departamento de cirugía de emergencia para luego trasladarla a reanimación. Allí, sin embargo, poco después de las 20, la mujer murió.
El juicio civil sobre las responsabilidades de esta muerte concluyó con la condena del hospital al que fue trasladada la mujer de 82 años pero, en opinión de los familiares de la víctima y de sus abogados Alessandro Milo y Amedeo Di Pietro, también la Región de Campania sería culpable «como titular del servicio sanitario nacional en el territorio regional, del nivel de calidad del servicio, así como en particular de la gestión y organización del servicio 118» que, sostienen, habría socorrido a la mujer con un notorio retraso contribuyendo luego a su muerte.