«Ya - comentan Ciro Auricchio y Giuseppe Moretti, secretario regional y presidente del Uspp - dentro de las cárceles se libra una guerra cotidiana contra los continuos intentos de introducir drogas y teléfonos móviles. Es necesario dotar a la policía penitenciaria de herramientas tecnológicamente avanzadas para erradicar esta plaga dentro de los establecimientos penitenciarios».
«En Poggioreale - recuerdan, finalmente, los dos sindicalistas - faltan 150 agentes pero aun así se logra mantener el orden y la seguridad interna».