En Gragnano, los carabineros de la estación local junto con los militares de Neil de Nápoles han realizado una serie de controles destinados a prevenir y reprimir el fenómeno del trabajo sumergido y a verificar las condiciones de seguridad.
Durante las operaciones, los carabineros sancionaron a la propietaria de una quesería.
La empresaria no había formado a los trabajadores sobre seguridad en el lugar de trabajo, ni mucho menos había sometido a examen médico a sus propios empleados.
Para la mujer, sanciones administrativas y penales por un total de 13 mil euros