Tres chicos armados con cuchillos, dos de ellos menores de edad, de solo 16 y 15 años. Los carabineros los sorprendieron la noche pasada en Nápoles durante los controles en las áreas de vida nocturna.
El mayor, de 24 años, un estudiante universitario, fue identificado por los militares en via Mezzocannone: tenía un cuchillo de hoja plegable enganchado al cinturón. Entre los callejones de los bares de Chiaia, un joven de 16 años, con una daga sin mango, solo una hoja afilada en el bolsillo: dijo que estaba armado para enfrentar con mayor serenidad la vida nocturna de la ciudad.
El más pequeño de los tres, de apenas 15 años, estaba en largo Berlinguer: llevaba consigo una navaja suiza. Los tres fueron denunciados, los menores fueron entregados a sus respectivas familias.
Los controles también identificaron a un traficante de drogas, un hombre de origen norte-africano, en la plaza Bellini: los militares, apoyados por la patrulla móvil de Nápoles, le encontraron 45 gramos de droga dividida en dosis, había hachís, cocaína, marihuana y éxtasis. En cambio, un hombre de 30 años, sorprendido en una scooter a pesar de que nunca había obtenido una licencia de conducir, fue denunciado.
Para un hombre de 59 años, se presentó una denuncia por evasión: sometido a arresto domiciliario, fue controlado en la calle sin ninguna autorización. Y otro hombre de 42 años de Sri Lanka, irregular en territorio italiano, fue denunciado.