Una trayectoria artística llena de éxitos y metas alcanzadas la del actor cómico Mariano Grillo. Una carrera llena de satisfacciones que desde su juventud ha visto al artista dividirse entre espectáculos exitosos, premios importantes y apariciones en televisión. Así, después de sus primeras experiencias en Rai en 2013 como cómico emergente, las interpretaciones teatrales junto a numerosos artistas famosos y su llegada al Zelig de Milán, Grillo habla de su carrera y de su forma de observar la evolución de la comedia, especialmente entre los jóvenes. «Me acerqué al teatro - cuenta Mariano Grillo - gracias a la herencia recibida de mi padre que tenía esta pasión y llevaba adelante su propia compañía de teatro. Desde el principio elegí el género cómico porque ese sentido de dar una sonrisa a la gente me hace sentir bien y feliz! De niño admiraba el teatro hecho por Eduardo, Totò, Massimo Troisi, son leyendas para mí, mitos absolutos que han llevado a Nápoles al mundo. Fueron ellos quienes hicieron nacer en mí esta pasión, esta vocación, este deseo de reír y hacer reír».
A la luz de sus experiencias, ¿en qué medida, según usted, ha cambiado la forma de hacer comedia en los últimos años?
«En los últimos veinte años el mundo ha cambiado mucho y quizás aún no nos damos cuenta. Hoy en día, las redes sociales hacen todo más inmediato. Antes, en cambio, ibas a ver a un cómico precisamente para sorprenderte de lo que diría y de cómo trataría los diversos temas relacionados con la actualidad, los personajes famosos y la política. Hoy en día, hacer reír se ha convertido en una misión más complicada. Y esto, quizás, también porque cada día somos abrumados por muchos factores y eventos negativos. Sin embargo, noto que el público busca una comedia cada vez más avanzada, una comedia “inteligente”. La misma que me gusta a mí y que trato de llevar adelante en mis espectáculos tratando de manera irónica los temas del presente y las cosas cotidianas como los temas relacionados con los puntos críticos en la pareja, desde el noviazgo hasta el matrimonio y los problemas de la sociedad napolitana».
¿Qué ha marcado más su aventura artística y cuáles son los proyectos para el futuro?
«Puedo decir que aún hoy, dos años después, siempre tengo en mí el maravilloso recuerdo de ganar el premio Massimo Troisi. De este reconocimiento, de esta valiosa victoria, creo que nace todo! De ahí nació “Todo bajo control”, un espectáculo cómico que cuenta las historias que nos han sucedido en los últimos años. Dicho así, puede parecer un espectáculo dramático pero en realidad es un trabajo muy cómico donde se ríe mucho! A menudo, también me río en el escenario, y esta característica para mí, cuando estoy en el escenario, es lo más hermoso e importante. Para el futuro siempre digo que “lo mejor está por venir”. Mientras tanto estoy preparando las próximas repeticiones de mi espectáculo que tocará varias etapas como Salerno y otros teatros en la provincia de Nápoles. Finalmente, pronto programaremos la próxima temporada teatral donde espero vivir muchas otras nuevas y hermosas emociones en toda Italia».