Es Nápoles, entre las grandes ciudades monitoreadas por el Istat, donde en enero se registra la tasa de inflación anual más significativa: 1,9%, más del doble de la media nacional (0,8%).
Anualmente, el sector con el aumento de precios más significativo es el de los productos alimenticios, con un 7,7% más que en enero de 2023. El Unc calcula que en Nápoles, la más alta entre las capitales de región y los municipios con más de 150 mil habitantes, esto se traduce en el mayor gasto adicional anual, equivalente a 419 euros para una familia promedio. En segundo lugar está Perugia, donde el aumento de precios del 1,7%, la segunda inflación más alta ex aequo con Trieste, resulta en un aumento de gasto anual de 417 euros por familia. Medalla de bronce para Trieste que con +1,7% tiene un gasto adicional de 415 euros anuales para una familia tipo.
Justo fuera del podio está Bolzano (+1,4%, en el 3er lugar por inflación, equivalente a 405 euros), luego Venecia (+1,4%, 369 euros), en sexto lugar Florencia (+1,4%, +366 euros), luego Livorno (+1,4%, 357 euros), Milán (+1,2%, 343 euros) y Verona (+1,1%, 283 euros). Cierra el top ten Rimini (+1%, +272 euros). En el ranking de las ciudades más virtuosas de Italia, gana Campobasso donde la inflación igual a -0,7% se traduce en un ahorro equivalente, en promedio, a 145 euros anuales. Medalla de plata para Reggio Emilia, donde la disminución de precios del 0,4% resulta en una disminución del gasto anual de 109 euros para una familia promedio. En el escalón más bajo del podio de las ciudades más ahorrativas, Ancona que con -0,3% tiene una reducción de gastos de 66 euros anuales para una familia promedio.
El aumento de la inflación en enero es particularmente preocupante si se considera el aumento de precios en los sectores primarios para las familias. Lo afirma Assoutenti que habla de una crisis negra para los alimentos, comentando los datos del Istat. «En el sector alimentario los precios, considerando también las bebidas, aumentan en un +5,8% anual en enero», explica el presidente Gabriele Melluso. «Esto significa - agrega - que solo para poner comida en la mesa, una familia con dos hijos se encuentra hoy gastando 466 euros más al año. Por eso pedimos al Gobierno que estudie medidas para contrarrestar el alto costo de vida como la cesta anti-inflación implementada el año pasado».