Llegan a Nápoles, de un fondo del Ministerio para la Discapacidad, 1,2 millones de euros para la realización de 15 proyectos asignados a las asociaciones del tercer sector que se comprometen por la discapacidad.
En todo el territorio ciudadano se realizarán actividades culturales, deportivas, lúdicas, formativas e inclusivas para garantizar a niños, jóvenes y también adultos ocasiones de socialización, compromiso y esparcimiento que normalmente les son precluidas por falta de recursos y personal necesario.
«Estoy muy feliz de que la candidatura de Nápoles para este proyecto haya sido aceptada. Es un evento importante por dos motivos: en primer lugar, se ofrecen trayectos inclusivos valorizando también pequeñas asociaciones de voluntariado; en segundo lugar, se proporciona la posibilidad de participar en actividades y eventos también a muchos ciudadanos, jóvenes y menos jóvenes, con discapacidad, que estaban en lista de espera. Los proyectos serán operativos en todas las Municipalidades con una duración de 12 a 24 meses».
Este es otro pequeño paso hacia un cambio de mentalidad que lleve a considerar la discapacidad no como un problema, sino como una gran oportunidad de diversidad que significa riqueza.