«Siempre estarás con nosotros» es el mensaje que destaca en una gran pancarta que encabeza el cortejo. Hay cientos en la calle: amigos, familiares, conocidos, Pianura - donde nació y creció - se moviliza por Francesco Pio Maimone, el joven napolitano asesinado en Mergellina hace un año.
Un año después, Nápoles no lo ha olvidado: lo demuestra el cortejo de amor por el pizzero que se hizo noticia por la manera en que fue brutalmente asesinado por un coetáneo: una pelea entre grupos de jóvenes considerados cercanos a la camorra que estalló solo por pisotear un par de zapatos de marca.
A un año exacto de la tragedia, el recuerdo de Francesco Pio mientras se sigue pidiendo justicia: el pasado lunes, la jueza de Nápoles Chiara Bardi aceptó las solicitudes del fiscal y condenó a seis años de prisión a Rocco Sorrentino (defendido por la abogada Francesca Di Dio). Sorrentino es una de las ocho personas consideradas por la DDA de Nápoles involucradas en esa absurda muerte.
Mientras tanto, dos centros juveniles de la ciudad de Nápoles serán nombrados en memoria de Francesco Pio y de Giogiò, Giovanbattista Cutolo, el otro joven napolitano asesinado el pasado verano en Plaza Municipio y cuyo caso judicial alcanzó ayer el primer grado de juicio con la condena a 20 años de prisión del asesino.